15 de enero de 2014



  ERES MÁS DE LO QUE IMAGINAS





Empiezo el año con agradables felicitaciones que comparten palabras de amistad verdadera, de cariño.

Pienso en la cantidad de propósitos que abordaré en este 2014 recién estrenado y antes de notar la dificultad del paseo por el calendario, decido pensar en relax, en reposo de conceptos y tranquilidad. ¡Ya me toca!

El tercer día, pensarás que es tarea propia de estas fechas pensar en los tradicionales propósitos. Hay para quiénes hasta los reyes, les dejan pistas para diseñar la esperada lista. Lejos de pensar que los nuevos deportivos harán magia, decides apuntarte en el gimnasio 
para conseguir la vida saludable que recomiendan los expertos.
Por deseo o necesidad, conseguir borrar propósitos conseguidos tiene su dificultad. Es verdad que si la acción es necesaria, se incorpora un aliado que no por motivador restará  esfuerzo. 

El año empieza con fuerza, y poco a poco se enfría la emoción hasta caer en el olvido. Para retrasar este momento, no olvides escribir a la constancia. Este es el verdadero propósito para conseguir los siguientes.

La rutina hace  el hábito y éste no se consolida hasta pasados mínimo 20 días. Para intentar incorporar algo nuevo, necesitaremos repetirlo, hasta que llegue a ser habitual, esto es lo primero que ayudará a conseguir tus buenas intenciones. Con la repetición llegará la frecuencia.

Recuerda que los hábitos antiguos nunca se olvidan, se almacenan en nuestro cerebro para volver en cualquier momento. No los recuerdas pero están ahí. Nunca bajes la guardia.
Para hacer inventario de intenciones pondera el esfuerzo y el tiempo que puedes dedicar, aún  con talento natural, tendrás que esforzarte para obtener buenos resultados. Ten en cuenta  tus límites y escribe sobre lo que puedas hacer. No se aprende ni se consiguen propósitos con métodos semanales milagrosos.
Si aún así decides ir a por ello, adelante, puedes conseguirlo.
Si crees que tu momento vital es poco favorable o si piensas que no estás para retos, ocúpate con otra cosa. Siempre puedes reposar a mi estilo…
¡Eres más de lo que imaginas?