A veces necesitamos
un toque para revisar creencias que dibujen nuevos caminos. El primer paso para
hacerlo es RECONOCER, hoy te invito a empezar el año mirando hacia el futuro. Por
lo general, la gente se quiere.
Siempre renuncio a listas y decálogos, sin embargo, con el
cierre de año toca auditarse para decididamente empezar con fuerza. Aunque sólo sea para evitar hablar de
propósitos no cumplidos, os dejo la lista de imprescindibles a olvidar con la
entrada del año:
1- Gustar a todos. La interpretación de las situaciones
condiciona las reacciones emocionales, cada persona las asume a su manera.
2-
Pensar constantemente en el pasado. La evolución llega
mirando hacia delante sacando el máximo provecho a los recursos disponibles.
3- Perseguir ajustes de cuentas que no aportarán nada. Olvida lo
antes posible. Deja ir a los que sólo consumen tu energía.
4-
Temores a futuro, a cambios, a errores.
5-
Limita la tendencia a pensar en términos dicotómicos; todo o
nada, perfecto o imperfecto. El tono medio es útil en una valoración positiva.
6-
El auto perfeccionismo. Tiene un alto coste. Encuentra un
equilibrio entre lo bueno y lo mejor. Valorar correctamente es aceptar que algo
está suficientemente bien. El valor de la perfección es subjetivo.
7-
Zona de confort.
8-
Agendar lo importante en la mitad del día. Intenta hacerlo
siempre al principio o al final. La gente recuerda más esas horas.
9-
Nervios. Relájate a menudo o al menos, evita tensiones
nerviosas.
10-
La pereza. Procura tener disciplina al menos con una
actividad. Intenta mantener la rutina al menos 21 días.
No caigas en las trampas que genera el estrés cada día, enfócate
en lo positivo y no te dejes llevar por pensamientos adversos.